lunes, 26 de noviembre de 2018

cuántos años más pasaran?

cuántos años más pasaran para que deje de pensar en lo que pudo ser y simplemente no fue.
cuántos años más deben pasar para entender que por ti ya no es justo esperar.

viernes, 16 de septiembre de 2016

Ser fuerte

Ser fuerte es amar a alguien en silencio.
Ser fuerte es irradiar felicidad cuando se es infeliz.
Ser fuerte es intentar perdonar a alguien a quien nos cuesta perdonar.
Ser fuerte es esperar cuando no se cree en el retorno.
Ser fuerte es mantenerse en calma en momentos de desesperación
Ser fuerte es demostrar alegría cuando no se siente.
Ser fuerte es sonreír cuando se desea llorar.
Ser fuerte es hacer a alguien feliz cuando se tiene el corazón hecho pedazos.
Ser fuerte es callar cuando lo ideal sería gritar a todos su angustia.
Ser fuerte es consolar cuando se precisa de consuelo.
Ser fuerte es elogiar cuando se desea maldecir.
Ser fuerte es tener fe en aquello que no se cree.
Por eso, por más difícil la situacion pueda parecer:
Áma y sé Fuerte!

lunes, 27 de junio de 2016

Silencio en defensa propia

Que incoherente puedo llegar a ser, hace apenas unos días decía y pregonaba la importancia hablar y ahora solo quiero callar, lo llamaré silencio en defensa propia, ese que mantenemos para evitarnos (temporalmente claro) una tormenta, así que me he quedado en silencio en medio de palabras que ya no digo, de lagrimas que ya no caen, de pasos que ya no doy.

miércoles, 20 de enero de 2016

Yo también

Yo también salté sin preguntar a dónde íbamos, si era larga la caída, si dolería.
Yo también entré en combate por un simple "ven".
Yo también pisé a quien no podía quejarse, al mudo, al ciego, al sordo.
Yo también follé con el ímpetu del que cree que "mía" tiene algún sentido, significado o realidad.
Yo también reduje al absurdo una frase que podría haber cambiado mi vida. "Maldito miedo".
Yo también mentí por ella, por rozarla un segundo, por abrir una ventana y verla desnuda bailar para mi solo, Vida.
Yo también recuperé el aliento, con otro aliento.
Yo también me harté de escuchar llorar a un niño, hasta que lo maté de madurez, nóminas y "esta vez tampoco llego a fin de mes".
Yo también extraño su risa, sus manos y su aliento a café.
Yo también desperdicié la última oportunidad con cara de imbécil, pensando que tenía que haber algún error.
Yo también decepcioné a más de los que juzgué por haberme decepcionado.
Yo también entendí demasiado tarde lo que significaban las palabras "demasiado tarde".
Yo también me acostumbré a una pérdida, dos, tres, qué más da, somos lo que perdemos para siempre.
Yo también corrí tan rápido que llegué el último de los triunfadores y el primero de los perdedores. Yo también salí a flote sin saber ni como y me tiré el rollo de esfuerzo de superación, sufrimiento y valor.
Yo también alimenté fieras con lo mejor de mí mismo y entregué mierda a quien me amó.
Yo también acabé por entender lo que jamás fue hecho para ser entendido, o eso creí, o eso Necesité entender.
Yo también sufrí por gusto, por miedo, por hacerme el fuerte, por mal perdedor.
Yo también me esforcé, justo cuando no quedaba ni el más mínimo resquicio para entrar.
Yo también expliqué mal un sentimiento, provocando una avalancha que me arrasó la ilusión.
Yo también tengo un pasado inconfesable a la vista de todos.
Yo también clamé venganza, sin darme cuenta que era contra mí mismo.
Yo también sobreviví y lo pago cada día, cada hora, cada minuto.
Yo también arrinconé un deseo, que murió de viejo, dejándome un fantasma horrible en la mirada que guardo para el espejo.
Yo también me encogí de hombros y lo di todo por perdido.
Yo también medía los pasos en metros y no en consecuencias.
Yo también empujé a quien no se decidía a saltar, sin averiguar primero si sabía nadar o no.
Yo también crucé un país, una ciudad,una habitación, para decir lo siento, demasiado tarde.
Yo también rompí lo que funcionaba, por saber como era por dentro.
Yo también confundí una caricia con un te amo, con un te quiero, con un te deseo. Pero carajo, como se parecían.
Yo también renuncié a un yo por un tú, que a estas alturas no recuerdo ni como se llamaba.
Yo también planifiqué una vida que se fue al carajo en el minuto uno.
Yo también lo intenté sin la más mínima posibilidad y me sorprendí al conseguirlo.
Yo también apagué la luz antes de decir "lo siento", de dar un portazo, de decir "hasta siempre".
Yo también fui reincidente en un amor sin medida, sin rumbo, sin salida.
Yo también no sé muy bien por qué pero siempre estoy ahí, esperando lo imposible.

Miramos para otro lado para evitar ver lo desagradable, sin darnos cuenta que con ello, nos perdemos la mitad de nosotros mismos.

Pero ahora, ya ves, yo podría llamarme tú, no somos tan diferentes.

Así que pido un aplauso para aquellos que construyen un nuevo hogar entre los escombros y las ruinas de lo que un día fue.

 -Daniel Hernandez Velazco


No olviden comentar y  compartir

👇🏽👇🏽👇🏽👇🏽






Instagram

viernes, 11 de diciembre de 2015

Merezco la pena

MEREZCO LA PENA, YO LO SÉ.

sé que soy un desastre como mujer, no soy la típica mujer que se arregla cada día para salir, no soy la típica que se conquista con regalos caros, ni la que pinta su rostro con capas de maquillaje. No, no soy la típica mujer que encuentras con tus amigos los sábados en los bares.

Soy una mujer simple y a la vez complicada. A veces ni yo misma me entiendo y se que eso puede llegar a sacar tanto de quicio a alguien pero te pido que me tengas paciencia.

Soy de las que me gustan los regalos hechos a mano, soy de las que quiere detalles inesperados sin fechas indicadas, soy de las que les gusta que le besen en la frente y le digan "te amo".

 me gusta que me hagas sonreír cada día, me gusta que me arropes si tengo frió, me gusta que me demuestres que me quieres en vez de decírmelo tantas veces. 

Repito que no soy la típica chica corriente y que eso supondrá que tendrás que dedicar mucho tiempo a conocerme a mi y a mi mundo propio. Pero créeme, merece la pena conocerme.

Soy una persona cariñosa,extrovertida y en ocasiones bastante tímida, me gusta pasar tiempo a solas y saber quererme a mi misma para luego poder querer a otra persona, como a ti por ejemplo. 

Me gusta pasar tiempo con mis amigas, con mi familia, me gusta salir a bailar aunque no tenga ni idea de hacerlo,soy de las que cuido de la gente que me importa y incluso de la que no también. 
Me gusta dedicar tiempo a las personas de mi entorno, ser detallista, paciente con ellos, ser su confidente, saber escucharlos y apoyarlos para mi eso es algo muy importante.

Me gustan las películas y manta los domingos, y de vez en cuando me encanta salir de fiesta y disfrutar del mundo ante mis pies.

reconozco aunque a veces ese punto me cueste reconocerlo, soy algo terca y orgullosa. Pero he aprendido a lo largo de los años que el orgullo lo pierdo por cualquiera que merece la pena. hazme sentir y ver que -"vales la pena"

-Ven, quiéreme, cuídame, protege-me. Pero sobretodo te pido que me aceptes con mis mayores defectos y virtudes. Que ames cada trocito que me forma a mi.

Por que cuando aprendas a amarme tal y como soy, sabre que me quieres sinceramente y ahi será cuando te agarre y créeme no te dejaré caer

viernes, 4 de diciembre de 2015

Y a veces

Sigo empeñada en enamorarme, en lanzarme de cabeza al abismo como si hubiera salido bien librada la ultima vez, como si no me hubiera quedado en un vacio de mas o menos 1.75m, un dolor en el pecho y  una herida en el alma, como si se pudiera solo olvidar el daño y volver a empezar sin temores, ya no estoy empeñada en enamorarme, el problema es que ya me enamoré, me enamoré de quien menos pensé, en las circunstancias más inesperadas de alguien cuya esencia y cuya fuerza pueden opacar la mía, alguien que doblega mi voluntad con una palabra y no sé si es bueno o es malo, alguien que despierta lo mejor y lo peor de mi, y a veces duele tanto que quema, por eso escribo cuando siento que el dolor terminará por romperme hasta los huesos y, a veces envenena, a veces sana, a veces alivia, a veces mata.

 Salté sin preguntar a dónde íbamos, si era larga la caída, si dolería,recuperé el aliento, con otro aliento.

y a veces está tan cerca que estando lejos lo siento a mi lado y a veces es tan ausente que extraño extraño su risa, sus manos y su aliento a café.
Me acostumbré a una pérdida, dos, tres, qué más da, somos lo que perdemos para siempre y salí a flote sin saber ni como y me mentí con el cuento de esfuerzo de superación, sufrimiento y valor.
He alimentado fieras con lo mejor de mí mismo y entreguado mierda a quien me amó.
He acabado por entender que lo que jamás fue hecho para ser entendido, o eso creí, o eso Necesité entender.
Y a veces sufro por gusto, por miedo, por hacerme la fuerte, por mala perdedora.




Instagram